viernes, 19 de abril de 2013

Como prevenir el cáncer de mama

El cáncer de mama es la lesión más mortífera y frecuente en mujeres de entre 20 y 59 años de edad, tanto en países desarrollados como en los que están en vías de desarrollo.
El cáncer de mama es un crecimiento anormal y desordenado de las células del tejido mamario, las células normales de este tejido son desplazadas por células cancerosas que no paran de crecer provocando así el cáncer.
Causas
A continuación enumeramos los factores de riesgo para el cáncer de mama, pero recuerda que tener uno de éstos no significa que inminentemente alguien padecerá cáncer de mama, así como el no tener un solo factor de riesgo no quiere decir que se esté exenta de padecerlo.
Herencia. Antecedentes familiares principalmente de madre o hermanas, los cuales aumentan de 2 a 3 veces el riesgo de cáncer que es aún mayor si estas parientes presentaron la enfermedad a temprana edad o antes de presentar su menopausia y/o si afectó ambos senos.
Edad avanzada. Una gran cantidad de los cánceres de mama avanzados son diagnosticados en mujeres de más de 50 años o después de que presentan su menopausia, a pesar de eso en los últimos años se ha observado cáncer de mama en mujeres más jóvenes por lo que se recomienda que la primer mamografía se haga a los 35 años.
Anticonceptivos. La toma prolongada de estrógenos, anticonceptivos orales y tratamientos de sustitución hormonal así como el presentar a una edad muy temprana la primer regla (entre los 9 y 12 años de edad), una menopausia tardía (mujeres que siguen menstruando a los 55 años de edad), tener el primer parto después de la edad de 30 años o nunca haber tenido uno.
Antecedentes personales. De cáncer de mama u otro cáncer, así como de enfermedad no cancerosa de mama predisponen la aparición de esta enfermedad.
Bebida y nutrición. El consumo de alcohol, el sobrepeso, la obesidad y la falta de actividad física.

Detéctalo
Para poder detectar oportunamente el cáncer de mama se recomienda:
  • Realizar una mamografía anualmente, ésta es el estudio más preciso para detectar el cáncer de mama de manera oportuna, es el único método que puede detectar calcificaciones o diferencias de tamaño en las mamas que puedan estar relacionadas con lesiones malignas.
  • Un examen minucioso de las mamas hecho por tu médico, por lo menos una vez al año.
  • Efectuar la autoexploración mamaria después de 7 días de cada periodo menstrual cuando los senos se encuentran menos sensibles, así como en las mujeres que han pasado la menopausia.
Señales de alerta
Deberás acudir con tu médico en caso de que en tu autoexploración notes:
  • Una masa no dolorosa en la glándula mamaria, generalmente el cáncer en etapas tempranas no es doloroso.
  • Cuando notes inflamación o agrandamiento de ganglios linfáticos de la axila, sobre la clavícula y en el pecho.
  • Algún cambio en la piel de tus senos ya sea que notes que se endurece o engruesa, que se inflama y adquiere una apariencia parecida a la cáscara de naranja o que aparecen grietas o surcos o cambios en la coloración.
  • Que del pezón sale un líquido de color café, sanguinolento o blanquecino.
  • El pezón hundido, con comezón, punzadas, ardor o irritación.
  • Que uno de los senos sea diferente al otro.
  • Cambios en la temperatura de la piel de la mama afectada

miércoles, 17 de abril de 2013

Frutas y verduras para dejar de fumar

Sabemos que fumar es un hábito bastante difícil de abandonar porque el tabaco contiene nicotina, que es altamente adictiva. Al igual que otras sustancias que crean adicción, el cuerpo y la mente se acostumbran tan rápido a la nicotina que el fumador necesita consumirla para sentirse bien. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más del 70% de las muertes causadas por cáncer de pulmón, bronquios y tráquea son atribuibles al consumo de tabaco.
Datos de la citada organización auguran que si se mantienen las tendencias actuales, el consumo de tabaco matará a más de 8 millones de personas al año en el 2030. La mitad de los más de 1000 millones de fumadores morirán prematuramente de una enfermedad relacionada con el tabaco.
La mayoría de los fumadores estarán de acuerdo en que dejar este terrible vicio no es nada sencillo. Pero lo cierto es que muchas veces, el utilizar algunas formas poco usuales nos puede ayudar a conseguirlo de una manera más fácil. Si tienes presente esto y te sientes listo para intentarlo.
Un estudio publicado en 2012 en la revista Nicotine and Tobacco Research, elaborado por investigadores de la Universidad de Buffalo revela que el incremento de vegetales y frutas ayuda a abandonar el tabaco. “Acabamos de identificar una herramienta que puede ayudar a dejar de fumar, o al menos hacerlo más fácil”, asegura Jeffrey P. Haibach, uno de los investigadores.
Según Haibach, una posible explicación sería que consumir verduras y frutas que contengan un buen aporte de fibra nos proporciona una sensación de saciedad, lo cual reduce las ganas de fumar. Además, el sabor de las frutas no solo no potencia el sabor del tabaco, sino que lo empeora.
Por lo anterior, las frutas y verduras se convierten en excelentes aliados para aquellos que desean dejar de fumar, y no en una excusa para no intentarlo.
Si esta práctica se combina con la terapia adecuada y con un programa de ejercicio continuado, el cese del hábito no tendría por que ser un proceso tan difícil de conseguir. Claro, lo ideal será buscar ayuda profesional especializada para dejar de fumar, teniendo en cuenta que no es algo tan sencillo como consumir más fruta y verdura para que por arte de magia se abandone, simplemente es una estrategia válida y complementaria para un programa integral de deshabituación del tabaco.