lunes, 26 de diciembre de 2011

Mujeres de latinoamérica temen por implantes mamarios

BOGOTA (Reuters) - El miedo y la irritación están creciendo entre las mujeres con implantes mamarios en América Latina, un mercado clave para la extinta firma francesa que usó silicona industrial para fabricar prótesis más baratas que fueron asociadas con riesgos para la salud.
Los implantes que están en el centro del escándalo fueron creados por la compañía Poly Implant Prothese (PIP) y parecen tener una tasa de rotura inusualmente alta, lo que provocó que las autoridades francesas instaran a su extracción.
En todo el mundo se vendieron unos 300.000 implantes PIP, usados en cirugías cosméticas para aumentar el tamaño de los pechos o reemplazar tejido mamario perdido, y decenas de miles de ellos fueron utilizados en América Latina, donde la demanda de procedimientos estéticos es alta.
La anfitriona de la televisión colombiana Alexandra Correa busca con desesperación saber si los implantes que se puso hace 10 años son seguros o no. Ella ha buscado respuesta de su cirujano durante las últimas semanas, pero él no le ha respondido a sus llamados. Ahora él está de vacaciones.
"Estoy muy preocupada", dijo Correa, de 32 años y quien pagó 2.200 dólares por aumentar sus pechos. "No puedo dejar mi salud a la suerte. La vanidad tiene un precio, pero la vida es mucho más valiosa", agregó.
"Es preferible que las mujeres tengan pechos del tamaño de una picadura de mosquito en lugar de unos grandes llenos de cáncer", dijo el lunes a Reuters.
En la vecina Venezuela, donde los implantes son tan populares que a veces son otorgados como regalo a las niñas de 15 años u ofrecidos como premios en rifas para recaudar fondos, hubo una oleada de nerviosismo entre las miles de mujeres que se operaron para aumentar el tamaño de su busto.
"He tenido esta prótesis por casi 10 años, desde mi tercer hijo, y hasta ahora siempre me sentí muy bien. Me hace sentir joven otra vez, una mujer no es sólo una madre", dijo Martha, una maestra de 47 años que, como muchos venezolanos en la época de Navidad, estaba vacacionando en la playa con su familia.
"Pero desde que he estado leyendo todas estas historias sobre la rotura de la prótesis francesas y que dan cáncer, debo admitir que me ha dado algo de miedo. No tengo ni idea de lo que es mío, pero voy a consultar con mi médico tan pronto cuando vuelva a Caracas después de las vacaciones", agregó.
Francia ha estado investigando posibles vinculaciones con el cáncer por el gel usado en los implantes PIP, pero hasta ahora no ha encontrado evidencias.