lunes, 13 de enero de 2014

la ansiedad

El estrés puede llegar a convertirse en una pesada carga. Sin embargo, una detección temprana y un tratamiento adecuado pueden convertirte en una de esas personas que nunca se alteran.
Según el doctor Cristóbal Gastó, del servicio de Psiquiatría del Hospital Clínic de Barcelona, existen diversos fármacos para tratar la ansiedad. En primer lugar, es necesario que un especialista realice un diagnóstico correcto, puesto que hay distintos tipos de ansiedad (trastorno obsesivo-compulsivo, ansiedad generalizada, estrés postraumático, fobia social...) que pueden requerir un abordaje terapéutico u otro.
Asimismo, es importante distinguir cuándo se tienen síntomas de ansiedad y cuándo se padece un trastorno. Por ejemplo, es normal presentar un estado de excitación cuando se va a realizar una actividad determinada, como hablar en público, pero eso no requiere tratamiento.
Hay fármacos rápidos (como las benzodiacepinas) y otros más lentos pero que han demostrado más eficacia (los llamados antidepresivos). Según el experto del Clínic de Barcelona, el tratamiento óptimo es el antidepresivo (aunque el paciente no tenga depresión) y la palabra. Y es que “a menudo es mucho mejor dar más explicaciones y escuchar al paciente. En este sentido, la combinación de fármacos y la terapia conductivo-conductual ha dado muy buenos resultados”. La duración del tratamiento nunca debería ser menor de un año. 
Aprende a diferenciarla: Ansiedad normal: Leve y efímera. Es adaptativa. El peligro es real. No tiene síntomas en el cuerpo. Emoción psíquica reactiva. No merma la libertad personal.
Ansiedad patológica: Más profunda y persistente. Deteriora psicosocial y físicamente. El peligro no es real. Provoca síntomas somáticos. Sentimiento vital. Reduce la libertad personal.